“Estábamos aislados. Las fuertes lluvias provocaron deslaves en la vía, y eso nos impedía salir», manifestó Elio Soledispa, habitante de la comunidad Pacheco de la zona rural del cantón Jipijapa.
En este lugar, una retroexcavadora contratada por la Prefectura de Manabí se encuentra limpiando el material de deslave a lo largo de la vía Chade – Naranjal – Pacheco – Cuchilla, de aproximadamente 4 kilómetros.
Las lluvias constantes en la zona afectaron 15 tramos, han sido intervenidos 6, explicó Isaac Pachay, técnico de la Prefectura.
“Estamos atentos a los llamados de auxilio de las diferentes comunidades que se suscitan por la temporada invernal», agregó Pachay.
Estos trabajos de respuesta emergente benefician directamente a 60 familias, quienes se dedican a la producción de maíz, plátano y yuca, productos que se comercializan en la cabecera cantonal Jipijapa.
